Al revés.
- Si los fps que sacan en los juegos (con independencia de usar un CPU u otro) son muy iguales, entonces el cuello de botella es la gráfica (que es la situación deseable).
- Si en un juego saca más fps con un procesador que con otro, pero la gráfica se mantiene al 100%, tampoco es problema (simplemente el juego aprovecha algo más un procesador que otro, pero el cuello de botella sigue siendo la gráfica)
- Si en un juego saca muchos más fps un CPU que otro, lo normal es que el que saca menos esté haciendo cuello de botella y la gráfica no llegue a trabajar al 100% constantemente.
Cuando me refiero a "muchos fps" me refiero a un % importante más. En un juego tipo CSGO que saque 200 ó 230 fps es insustancial. En un juego como Battlefield 1 que saque 50 en vez de 65 fps, si es algo más grave, dado que la gran mayoría de monitores son de 60Hz (y por tanto el VSYNC te limitará a 60fps). Al final, salvo que tengas un potencial gráfico enorme (tipo GTX 1080 o un Crossfire) en juegos no-CPU-dependientes no deberías encontrar diferencias, mientras en juegos CPU-dependientes las diferencias se harán más evidentes. Y esto va a pasar tanto entre i5 de diferentes generaciones como entre i5 de diferentes frecuencias.
Every Core i5 Generation Benchmarked: Lynnfield to Skylake, 7 years of i5 Goodness! - YouTube