Voy a intentar explicar todo con claridad y paso a paso. Primero os pongo las características del ordenador, es recién comprado y montado, todo nuevo.
-Equipo:
Procesador: Ryzen 7 2700X
Placa base: Aorus Ultra Gaming X470
Gráfica: Gigabyte RX 580
Fuente: EVGA SuperNOVA 650W G3
Ram: G.Skill Trident Z 3200Mhz
Discos duros: 1 SSD KINGSTON de 240GB y un HDD Seagate de 2TB.
-Problema:
Como he puesto en el título, el problema es que cada vez que apago el ordenador y lo vuelvo a enchufar, el rendimiento en juegos baja a más de la mitad.
Os voy a poner un ejemplo de lo que me pasa:
Partimos desde cero, el ordenador está recién montado, Windows recién instalado, acabo de instalar todos los drivers y me dispongo a jugar al Battlefield V. Hasta aquí todo perfecto. Con todo al ultra saco unos 70-80 fps de media.
Ahora pongamos que no quiero seguir jugando, apago el ordenador. Al rato, quiero volver a jugar; enchufo el ordenador, abro el Battlefield V y es aquí cuando el rendimiento baja de los 80 fps a los 20fps, ya sea en el menú o en partida. (En este caso he puesto como ejemplo el Battlefield V, pero pasa con cualquier juego).
Después de mucho probar, la única solución que había encontrado para solucionar esto es desinstalar e instalar drivers de la gráfica cada vez que enchufaba el ordenador. Una vez he hecho eso, el rendimiento vuelve a subir, pero de nuevo, al apagarlo, es como si se perdiese la configuración y de nuevo baja el rendimiento.
Digamos que estaba en un bucle infinito de desinstalar e instalar drivers cada vez que enchufaba el ordenador.
La última solución/alternativa que he encontrado es, desde el programa de configuración de radeon, en el apartado de "Preferencias", si hago clic en "Restaurar valores predeterminados de fábrica", mágicamente, el rendimiento vuelve a subir automáticamente, incluso con el juego abierto, al meterme, pasa al instante de 20fps a 80. Todo esto, de nuevo, funciona hasta que apago el ordenador.
-Pruebas realizadas:
He formateado la ssd y he instalado la versión más reciente de Windows 10. (Antes tenia la LSTB).
He probado a poner la gráfica de un amigo (es exactamente la misma) pero sigue dando los mismos problemas.
He hecho un Clear CMOS de la BIOS.
He comprobado que todo esté bien conectado y he cambiado de slots la ram.
Ya no se me ocurre que probar. Muchísimas gracias a todos de antemano y perdón por el tocho
-Equipo:
Procesador: Ryzen 7 2700X
Placa base: Aorus Ultra Gaming X470
Gráfica: Gigabyte RX 580
Fuente: EVGA SuperNOVA 650W G3
Ram: G.Skill Trident Z 3200Mhz
Discos duros: 1 SSD KINGSTON de 240GB y un HDD Seagate de 2TB.
-Problema:
Como he puesto en el título, el problema es que cada vez que apago el ordenador y lo vuelvo a enchufar, el rendimiento en juegos baja a más de la mitad.
Os voy a poner un ejemplo de lo que me pasa:
Partimos desde cero, el ordenador está recién montado, Windows recién instalado, acabo de instalar todos los drivers y me dispongo a jugar al Battlefield V. Hasta aquí todo perfecto. Con todo al ultra saco unos 70-80 fps de media.
Ahora pongamos que no quiero seguir jugando, apago el ordenador. Al rato, quiero volver a jugar; enchufo el ordenador, abro el Battlefield V y es aquí cuando el rendimiento baja de los 80 fps a los 20fps, ya sea en el menú o en partida. (En este caso he puesto como ejemplo el Battlefield V, pero pasa con cualquier juego).
Después de mucho probar, la única solución que había encontrado para solucionar esto es desinstalar e instalar drivers de la gráfica cada vez que enchufaba el ordenador. Una vez he hecho eso, el rendimiento vuelve a subir, pero de nuevo, al apagarlo, es como si se perdiese la configuración y de nuevo baja el rendimiento.
Digamos que estaba en un bucle infinito de desinstalar e instalar drivers cada vez que enchufaba el ordenador.
La última solución/alternativa que he encontrado es, desde el programa de configuración de radeon, en el apartado de "Preferencias", si hago clic en "Restaurar valores predeterminados de fábrica", mágicamente, el rendimiento vuelve a subir automáticamente, incluso con el juego abierto, al meterme, pasa al instante de 20fps a 80. Todo esto, de nuevo, funciona hasta que apago el ordenador.
-Pruebas realizadas:
He formateado la ssd y he instalado la versión más reciente de Windows 10. (Antes tenia la LSTB).
He probado a poner la gráfica de un amigo (es exactamente la misma) pero sigue dando los mismos problemas.
He hecho un Clear CMOS de la BIOS.
He comprobado que todo esté bien conectado y he cambiado de slots la ram.
Ya no se me ocurre que probar. Muchísimas gracias a todos de antemano y perdón por el tocho